Esos Nazarenos o Penitentes pacenses

La Semana Santa se lleva a cabo desde el domingo de Ramos hasta el domingo de Pascuas, aquí en nuestra ciudad éste evento se celebra con una serie de procesiones que conmemoran la Pasión de Cristo, todo ello es una mezcla de acto religioso y cultural, donde aparecen las llamadas Hermandades o Cofradías, las cuales en Badajoz contamos con varias de ellas. 

Una de las figuras características en estas fechas son los Nazarenos (también conocidos como penitentes), cubiertos de sus prendas típicas, que forman una parte esencial de este evento.

Ellos son los hermanos de una cofradía que hacen la estación de penitencia en la Semana Santa con la indumentaria que figura en las reglas de la Hermandad. 

Ya desde el siglo XVI había cortejos de cofrades que posicionan acompañando a los pasos, estos portaban insignias similares a las actuales, tales como estandartes, guiones y banderolas.

El gorro típico de penitente lo toman de la Santa Inquisición que imponía ese gorro a los ajusticiados, entonces el gorro era más bajo y no cubría el rostro del penitente pero a principios del siglo XX, (creo que fué el sevillano Juan Manuel Rodríguez Ojeda), revolucionó el mundo de las hermandades con sus diseños para las cofradías dotándolas del colorido y belleza visual que tienen ahora, y una de las medidas que tomó fue aumentar el tamaño de los capirotes para hacerlos más estéticos.

Hoy en día, el cono de la capucha significa una especie de surgimiento hacia los cielos y es por eso que esta parte del atuendo de los Nazarenos tiene gran importancia, fue diseñado de tal manera para pretender que su penitencia se coloque más cerca de los cielos.

Los Nazarenos van organizados en tramos que inicia alguna insignia, esas insignias que tienen las hermandades son muy variadas y cada una tiene su sentido, algunas de ellas son universales y otras particulares de la hermandad en concreto.

Pienso y creo que los Nazarenos o penitentes forman una parte esencial de esta celebración, pues sus actos de penitencia, algunos tan fatigosos y dolorosos que solamente con la fe se puede llegar a entender, porque muchos se ofrecen voluntarios para sufrirlos en sus propias carnes, ya sea para cumplir una promesa o para suplicar ayuda divina. 
Mi reconocimiento y admiración a todos ellos por esas caminatas que realizan, (algunos de ellos descalzos e incluso con minusvalía) en nuestra Semana Santa en esas procesiones tanto diurnas como nocturnas. ¡¡ENHORABUENA POR ELLO, AMIGOS!!. 

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