Jerónimo Soto Lozano nació en Medellin en 1912 y falleció en Badajoz en 2002, fue un maestro de orfebrería, un artista de la forja de méritos incuestionables,su primer contacto con el mundo del hierro y los metales comenzó cuando tenía 13 años, empezando a trabajar en la herrería de su pueblo, donde empezó a conocer los principios básicos de la forja.
Si bien desde sus inicios lo hizo como forjador, dedicándose desde su juventud a dar forma a los metales, en especial al hierro, calentándolos al rojo para moldearlos y darles características bien definidas a base de martillo y yunque.
Desde joven también le apasionaba la escultura y a los dicisiete años esta pasión le condujo a realizar una copia del natural en escayola a punta de navaja y poco màs, de la estatua de Hernán Cortés existente en su pueblo natal de Medellin.
Estudió mediante una beca en el taller de Melistería de la Escuela de Artes y Oficios de Toledo, y en 1942 es nombrado Ayudante de Taller de la Escuela de Artes y Oficios de Badajoz y poco más tarde en 1947 supera las pruebas y exámenes que se convocan y es nombrado Maestro de Taller de Forja y Cerrajería del Centro.
Completó su formación académica en 1958 adquiriendo en Madrid el título oficial de Maestro Industrial de la Rama del Metal, ganando más tarde en 1964 las oposiciones para el ingreso en el Cuerpo del Estado para Maestros Numerarios del Metal con destino en la Escuela Oficial de Maestría Industrial de Badajoz.
El maestro Jerónimo demostró siempre una voluntad férrea de superación en el trabajo, celoso hasta el máximo en el cumplimiento de sus obligaciones tanto con compañeros como alumnos, responsable en todo momento de las tareas que le encomendaron por imperativo de los programas de enseñanza, así como humilde y sencillo en el trato con todos.
Fruto de su labor sobresalen entre todos algunos discípulos tales como Lorenzo Horrillo, campeón internacional de Cerrajería Artística, Salvador del Amo, campeón nacional de la misma especialidad y profesor posteriormente, así como Guillermo Amador y Antonio Vieira ambos también profesores además de una interminable lista de alumnos que sería imposible redactar aquí en esta página.
Sus trabajos han obtenido éxito en diversas muestras y exposiciones de artesania tanto provinciales, como nacionales e incluso internacionales.
Toda su obra está reflejada en los temas de uso domésticos, retratos, de carácter religioso, en lámparas y faroles, en rejas, en escudos, en temas mitológicos, etc. etc. y una parte de ella fue donada por su familia al Museo de la Ciudad Luís de Morales.
Su larga vida docente concluyó con su jubilación a los 70 años en 1982.
Mi agradecimiento a Salvador del Amo Seguro, por los datos y fotografías que componen esta página dedicada a su admirado maestro, ya que sin ello no hubiera sido posible homenajear humildemente con este pequeño recuerdo a D. Jerónimo Soto Lozado.
Completó su formación académica en 1958 adquiriendo en Madrid el título oficial de Maestro Industrial de la Rama del Metal, ganando más tarde en 1964 las oposiciones para el ingreso en el Cuerpo del Estado para Maestros Numerarios del Metal con destino en la Escuela Oficial de Maestría Industrial de Badajoz.
El maestro Jerónimo demostró siempre una voluntad férrea de superación en el trabajo, celoso hasta el máximo en el cumplimiento de sus obligaciones tanto con compañeros como alumnos, responsable en todo momento de las tareas que le encomendaron por imperativo de los programas de enseñanza, así como humilde y sencillo en el trato con todos.
Fruto de su labor sobresalen entre todos algunos discípulos tales como Lorenzo Horrillo, campeón internacional de Cerrajería Artística, Salvador del Amo, campeón nacional de la misma especialidad y profesor posteriormente, así como Guillermo Amador y Antonio Vieira ambos también profesores además de una interminable lista de alumnos que sería imposible redactar aquí en esta página.
Sus trabajos han obtenido éxito en diversas muestras y exposiciones de artesania tanto provinciales, como nacionales e incluso internacionales.
Toda su obra está reflejada en los temas de uso domésticos, retratos, de carácter religioso, en lámparas y faroles, en rejas, en escudos, en temas mitológicos, etc. etc. y una parte de ella fue donada por su familia al Museo de la Ciudad Luís de Morales.
Su larga vida docente concluyó con su jubilación a los 70 años en 1982.
Mi agradecimiento a Salvador del Amo Seguro, por los datos y fotografías que componen esta página dedicada a su admirado maestro, ya que sin ello no hubiera sido posible homenajear humildemente con este pequeño recuerdo a D. Jerónimo Soto Lozado.
Algunas de su infinidad de obras
Cancela y Ventanilla
Aldabón y Tirador
Aldabón y Tirador
Alminiceros
Ánfora con flores
Candelabro
Cabeza de Cristo
Cigueña
Conjunto árabe
Corona de alfiler de pecho de
la Virgen de la Palma
Cristo saliendo del cáliz
Cuadro de niños griegos
Emblema de Farmacia
Escudo de la fachada de la
Escuela de Maestría Industrial
Espetera
Espetera
Espetera
Farol antorcha
Farol para un paso procesional de la Soledad
La Fragua de Vulcano
Guerreros con casco
Imagen de Nuestra Señora del Sagrado Corazón
Jarrones
La Dolorosa y la Virgen con el Niño
La Maternidad
Lámpara de mesa
Lámpara de seis lados
Lámpara
Mesa árabe
Palanganero
Palomilla y Farol
Pié de cocina
Pié de cocina
Piezas colgadas a la entrada de su casa
Pisapapeles de Pajarita
Potencias del Cristo de la Borriquita
Reja con figuras de Boabdil y Zoraida
Reja de la Escuela de Maestría Industrial
Relieva de cabeza de guerrero
Retablo de su Santidad el Papa Jan Pablo II
Retrato de su nieta María Jesús
Retrato de su nieto Jesús María
Saltamontes dedicado a su maestro D. Antonio Guiterrez
Tapa y cantoneras del libro de Reglas de la Hermandad
de la Cofradía de Comerciantes
Vaso cilíndrico
Viacrucis para el Cristo de la Fé (Crucificado)
Virgen en oración
Virgen con el Niño y la Virgen Gitana
oooooooooooooooooooooooooooooo
Abueeelo siempre te amaré. Saludos de tu bisnieta Mara Soto y tu nieto Moisés Soto Crespo (Blasco Infante)
ResponderEliminarBueno, mi ídolo, después de Don Bosco.
ResponderEliminarFue uno de los eslabones más importantes que componen mi cadena cinemática de la vida. Sin el, en determinado momento, esta se hubiera roto. Antes como profesor y después como compañero, fue una persona admirada, mi referente principal. Con el que tuve la suerte de compartir, aprendiendo siempre, muchas horas. En su taller, en la cueva, como algunos vecinos le llamaban, de aprendiz, colabore en muchos trabajos que se citan.
Maestro, siempre en mi corazón, y en de mi familia. Algun día, volveremos a vernos y disfrutar de ratos como los de antaño.