Los personajes de una ciudad se definen por su quehacer, por la amplitud de sus relaciones y por la capacidad que tienen para dejar huella. La ciudad de Badajoz está repleta de personajes que han aportado algo a ella en distintos y diversos motivos, bien en lo social, en su barriada, en los medios de comunicación, en la música, en lo profesional, en su manera de ser..............
Ana María Torres Carvajal nació en Badajoz el 5 de marzo de 1959, ingresó en el cuerpo de la Policía de Badajoz el 26 de mayo 1980, y fue la que rompió los estereotipos de la época dando visibilidad y dignificando el papel de la mujer en las policías locales e iniciando así, un camino para el resto de ellas, que hoy día forman el colectivo de mujeres policías de nuestra región.
Ella fue la primera mujer Policía Local en Extremadura, y Ana María recordaba que en sus primeros tiempos de patrulla sus superiores la mandaban siempre hacer el servicio en el mercadillo, y al cabo de un año consiguió patrullar en coche, hecho que fue, el regalo de sus compañeros por su cumpleaños, aunque fuera de copiloto.
En Extremadura hoy en día existen muchas mujeres que son policías locales, pero en 1980, ¡ella era la única!.
A título póstumo, la Junta de Extremadura en 2023 la distinguió con la placa de reconocimiento a la labor Policial y de Seguridad de Extremadura y el Ayuntamiento de Badajoz le tiene concedida una avenida con su nombre en la ciudad.
Falleció el 17 de febrero de 2023..... En su recuerdo.
Manuel Murillo Labrador, conocido popularmente como "Chico", era un peluquero que durante muchos, pero que muchos años utilizó la máquina, las tijeras y la navaja para arreglar las cabelleras y las barbas a los vecinos de la Picuriña (entre los que me encuentro), en esa barbería que estaba junto aquella fuente que tantas veces fuimos a por agua. Infinidad de veces me decía que leyera las noticias del periódico en voz alta para que los tertulianos y clientes mayores que tenía allí, pudieran saberlas al oírlas ya que ellos no sabían leer.
Posteriormente se trasladó a la barriada de las 800 y siguió haciéndolo allí en la Avda. del Sol, hasta su jubilación. A pesar de los años transcurridos desde que cortaba el pelo en su primera barbería de la Picu, tengo de él un gran concepto de su manera de ser como persona, era amable, servicial y cariñoso con nosotros. Pienso que muchas personas tienen de él ese mismo parecer que recuerda este que escribe.
Manuel Rodríguez Méndez era conocido cariñosamente en el mundo del deporte pacense como Manolo "Chocolate", fue sin duda alguna un enamorado del fútbol base así como de su ciudad de Badajoz, donde nació el 27 de agosto de 1927. Su trabajo, su constancia y su buena voluntad fue íntegra por la cantera pacense. Fue entrenador del CD Badajoz Juvenil y creó y fundó el Independiente, este club lo dejó en manos de otro obrero y enamorado del fútbol base que no fue otro que Paco Chicho. También tuvo en placer y el honor de dirigir la Selección Extremeña.
El equipo de sus amores fue sin duda el Badajoz Juvenil, y de el salieron jugadores que llevaron el nombre de Badajoz y de Extremadura a lo más alto del fútbol nacional, por citar algunos de ellos tales como Adelardo, Pachón, Pérez Lozano, Vicente Medina, Pereira, Miguel Celdrán, Eusebio, Toni Cabello, .... y tantos otros.
Fue recompensado por el Colegio de Entrenadores con el título de Entrenador de Honor.
Manolo era una persona que llevaba dentro ese deporte que es fútbol, y lo vivió de una forma altruista, ya que no cobraba nada por ejercer su trabajo de entrenador. Ha dejado un abanico de jugadores que han sido gloriosos para nuestra ciudad de Badajoz, para Extremadura y para España. Falleció en Badajoz el 12 de mayo de 2017....... ¡En tu recuerdo Manolo!.
Mi agrademiento a Jesús Sánchez y a Fernando Alcantara por la información e imágenes que contiene esta página. Gracias por ello amigos.
Roberto Serrano Álvarez nació en Badajoz el 30 de enero de 1917, estudió arquitectura en la Universidad de Madrid, tras la guerra civil terminó la carrera que había empezado antes del inicio de la misma.
En los 40 ingresó en el ayuntamiento de Badajoz, dónde ejerció como aparejador municipal hasta su jubilación en 1982, siguiendo con el ejercicio libre de su profesión.
Fué de los primeros aparejadores de la provincia siendo el colegiado número 8 del Colegio oficial de Aparejadores de Badajoz.
En su trayectoria profesional siempre intentó ayudar a todo aquel que lo necesitaba, con independencia de su posición, con una gran visión social.
Falleció en el año 2007.
Mi agradecimiento Félix Sanchez Serrano por los datos y fotografía.
Juana María de los Dolores de León (Lady Smith), nació en Badajoz en 1798 y falleció en Londres en 1872, fue esposa del oficial inglés sir Harry Smith, militar al servicio del Ejército británico y quien en 1847 fue destinado a El Cabo (Sudáfrica), donde ejerció de gobernador y comandante en jefe de la colonia.
La pacense Juana María de los Dolores de León pertenecía a la noble familia de los Ponce de León, de ilustre abolengo leonés. Nada se sabe de su infancia, pero en abril de 1812, cuando las tropas del general Wellington conquistaron la ciudad de Badajoz tras un duro combate contra el ejército de Napoleón, la joven, que entonces contaba catorce años de edad, buscó refugio en el campamento de los oficiales británicos.
Fue allí donde conoció a Harry Smith once años mayor que ella, un curtido militar al servicio del Ejército británico que casi de inmediato se enamoró de esta hermosa muchacha que había perdido a toda su familia. Un mes más tarde la pareja contrajo matrimonio en el mismo campamento con la bendición del duque de Wellington. No hubo tiempo para una romántica luna de miel, y a partir de este momento la vida de la flamante señora Smith vendría marcada por la dura vida en los campos de batalla. En los meses siguientes Juana acompañó a las tropas británicas en las últimas y victoriosas guerras peninsulares de Wellington contra los franceses.
La joven se adaptó con rapidez a las marchas agotadoras a lomos de caballo, a la comida escasa y a dormir en incómodas tiendas de campaña. El olor a pólvora y a sangre la acompañaron a lo largo de su intensa vida. Durante los años siguientes, y tras la encarcelación de Napoleón en Santa Elena, el matrimonio disfrutó de cierta tranquilidad en los alrededores de París, hasta que en julio de 1828 pusieron rumbo a Ciudad del Cabo, en Sudáfrica. Harry Smith fue designado agregado militar del gobernador general de la colonia, sir Lowry Cole.
Su esposa vivió doce años en la región más austral del continente africano mientras su marido libraba batallas contra las tribus nativas en las nuevas fronteras de la colonia británica de El Cabo. Juana tenía treinta años cuando pisó por primera vez tierras africanas y, tras años de vida nómada, pudo al fin disfrutar de su primera residencia fija. En 1840, Harry Smith dejó la Colonia porque fue nombrado Ayudante General de las tropas de Su Majestad Británica en India el 6 de Marzo de 1840, a instancias de Lord Hill y de los informes positivos de Lord Glenelg y con el pesar del Gobernador D'Urban porque le estimaba mucho como persona y como Ayudante y estratega militar.
En la India, Harry que había sido ascendido a coronel, trabajó durante siete años en calidad de agregado militar de las fuerzas del Imperio. Cuando en 1847 el matrimonio regresó a Inglaterra, el valiente militar fue recibido como un héroe por sus éxitos contra los sijs en la batalla de Aliwal, donde se convirtió en uno de los generales más respetados del Ejército británico. En septiembre de 1847 Juana Smith regresó de nuevo a El Cabo, pues su marido había sido nombrado gobernador de la colonia.
El destino quiso que el nombre de su esposa quedara para siempre inmortalizado en la tumultuosa historia de la actual República de Sudáfrica, al bautizar una de sus ciudades más emblemáticas como Ladysmith, en la región del Natal. A esta intrépida pacense todavía se la recuerda en esta ciudad que se hizo tristemente célebre en el mundo entero cuando en 1899 los bóers tuvieron sitiados a los ingleses cien días.
Nada de eso hubiera podido imaginar la pequeña Juana cuando deambulaba por la bombardeada Badajoz.
En el Museo de Ladysmith se conserva un retrato suyo, así como un par de pendientes y una peineta. Juana María de los Dolores de León nunca renunció a sus orígenes y le gustaba en las recepciones oficiales vestir con mantilla y bailar fandangos. Formidable, Juana María de los Dolores León-Smith, mujer que supo amar, luchar, sufrir, gozar y soñar, como la vida misma, junto a su marido, antes del feminismo. Una mujer española, concretamente de Badajoz.
En 1852 el gobernador Smith que ya había cumplido los sesenta y cinco años fue relevado de su cargo y el matrimonio regresó a Inglaterra.
Ocho años después el veterano militar falleció en Londres y fue enterrado con todos los honores en el cementerio de su localidad natal, Whittlesey. Juana le sobrevivió doce años, alejada de la vida social y refugiada en los recuerdos de su apasionante vida en común. Falleció en su domicilio londinense de 79 Cadogan Place el 10 de octubre de 1872 y su cuerpo descansa junto al de su insigne marido.
El Parlamento británico le concedió, al enviudar, una pensión de 500 libras en reconocimiento a los servicios prestados al país.
Cuenta, asimismo, con una calle en Badajoz en la barriada del Cerro Gordo además de otra en Almendralejo.
José Villafaina de la Cruz nació en Badajoz en 1910, este gran podólogo fue pionero en España de esta especialidad paramédica. En el año 1958 fue fundador en Madrid en conjunto con otros compañeros de otras regiones de la Agrupación de Podólogos de España, además de miembro y pieza fundamental de las Juntas de Gobierno, hasta la creación de Escuela Universitaria de Podología. En Extremadura fue delegado hasta la creación de la Sociedad Extremeña de Podólogos en 1979, de la que fue fundador y presidente hasta 1991.
Como representante oficial de Extremadura ante la Federación Española, participó en numerosos Congresos en España, Europa y Estados Unidos, destacándose por sus trabajos de investigación, que vieron reconocidos sus esfuerzos en la realización de videos y películas científicas de la especialidad con la concesión de diversos galardones.
Fue organizador del XIV Congreso Nacional que se celebró en Badajoz, y en varias ocasiones impartió cursos específicos para jóvenes podólogos y postgraduados, tales como: I Curso de Actualización Podológica, I Curso de Formación Continuada de Ortopodología, Curso Intensivo de Técnicas Podológicas, Ortopodología Aplicada...... y varios más.
Recibió distinciones de todo tipo, entre las que destacan la concesión en 1988 por el Consejo de Ministros, del ingreso en la Orden Civil de Sanidad con la categoría de Encomienda, la primera concedida a un podólogo y que vino a confirmar la labor profesional de este pacense ejercida hasta los ochenta y un años. Por su colaboración científica recibió la Gran Cruz de Oro de la Asociación de Podólogos de España en el XII Congreso de Valladolid, el Trofeo Carabela en el III Congreso Andaluz de Podología, la placa especial del Congreso Nacional de Granada y la de la Asociación Canaria en el XXII Congreso Nacional de Madrid, por su extraordinaria labor en pro de la podología española. En Extremadura recibió la insignia Cruz de Oro del Colegio Oficial de A.T.S. y D.E. de Badajoz, y el homenaje y placa concedida por los Podólogos extremeños.
El Ayuntamiento pacense le premió concediendo su nombre a una calle de la ciudad. Falleció en Badajoz en 1995.
En Madrid, en 1980, a sus ochenta años recibió en la clausura del XXII Congreso y ante la audiencia de casi 1.000 personas, un sentido homenaje de reconocimiento de la Asociación de Podólogos de España.
Él dijo que suponía que las nuevas generaciones de podólogos tendrían más facilidades al encontrarse labrado el camino, ya que lo realizado las Asociaciones ha sido importante en gran número de conquistas.
En su recuerdo.........
Mi agradecimiento a su hija Amalia Villafaina Muñoz por la imagen y los datos que aparecen aquí expuestos, gracias, muchas gracias por ello.
Salustiano Cantos Vivas era conocido popularmente en Badajoz como "el gitano señorito", estuvo casado con Lucia Rosa Tavares nacida en la Codosera, fueron padres de ocho hijos. Nacido en Alburquerque y heredero directo junto con su hermana Carmen de muchas tierras en ese pueblo (de ahí, el famoso Cortijo Los Cantos) lo perdió todo, tras unos años en el extranjero, haciéndose cargo de esa fortuna otros familiares y sin contar con ellos en ningún sentido.
Al casarse recaló en Badajoz, residiendo un tiempo en el Casco Antiguo y mas adelante se trasladó al barrio de la Luneta , allí se hizo muy popular ya que era de los pocos payos que vivían en ese barrio mayoritariamente de gitanos, por ello empezaron a llamarle "el gitano señorito". Con su mujer Lucía abrieron una tienda de comida donde ella preparaba dulces que luego sus hijas vendían por el centro de Badajoz, debido a ello, eran llamadas y conocidas cariñosamente como "las Bollitos" apodo que se mantuvo para siempre.
Salustiano era de profesión encofrador, pero además debido a la situación de la vida tan precaria entonces, ayudaba a la familia pasando café de Portugal, hecho que le condujo a estar recluido en prisión un año.
Fue el primero que compró una televisión en toda la Luneta, y abría las puertas de su casa a todos los vecinos para pudiera ver las novelas, películas y demás programas televisivos. Al fallecer su esposa Lucía con apenas 43 años, marchó a Barcelona con todos sus hijos. Salustiano contrajo matrimonio de nuevo y vivió sus últimos años en Madrid, donde falleció en 1972 a los 55 años. Era un hombre con una elegancia exquisita y gran corpulencia, y fue muy querido por todos sus vecinos.
Sus familia actual y descendientes siempre lo recordarán con un cariño especial, y serán toda su vida con mucho orgullo, "LAS NIETAS DEL GITANO SEÑORITO".
En su recuerdo.........
Mi agradecimiento a su nieta Lola Cantos por los datos y fotografías que componen esta página, gracias, muchas gracias por ello.
En nuestra ciudad existieron una serie de Practicantes (luego ATS y posteriormente Enfermeros) aquellos de hace algún tiempo que iban en bicicleta o en aquellas motos como Guzzi, Vespa, Lambretta....etc., trabajaban muchas veces de forma altruista, pues aunque no pudieran cobrar su trabajo acudían a las casas a las horas que fuera, ellos eran aquellos que abrían con extremo cuidado su cartera, y de ella extraían un sospechoso estuche de metal, en cuyo interior iban a buen recaudo todos los artilugios necesarios para poner una inyección, después procedía a desinfectar, lenta y sigilosamente, aquella aguja grandísima a utilizar, y luego, terminado el proceso preliminar, la insertaba en la jeringa y mirando con una maliciosa sonrisa al enfermo condenado a la tortura, golpeaba suavemente la jeringa para que de la aguja brotasen un par de gotas, todo ello antes de amenazar con aquella inyección que no veas como dolía, pero que todo lo curaba.
A todos esos practicantes quiero expresarles mi agradecimiento desde aquí, por su labor profesional y compartir en su recuerdo este pequeño y humilde homenaje a todos ellos. Por vosotros, muchas gracias por vuestra labor GRANDES SEÑORES.
En este listado de sus nombres se que faltan, no muchos, sino muchísimos más, los cuales se irán anotando paulatinamente con vuestro apoyo y colaboración.
Mi agradecimiento a todas esas personas que han tenido la gentileza de aportar los nombres y fotografías de los aquí citados.
D. Alfonso García. - D. Álvaro Bernalte. - Dña. Ana Martínez Lagoa. - D. Andrés Seco Fernández. - D. Angel Fuertes Berniche. - D. Angel León Sánchez. - D. Angel Llinas. - D. Angel Orantos. - D. Antonio Delgado Valerio. - D. Antonio Galache. - D. Antonio Juez. - D. Blas García Molina. - D. Bartolomé Leal. - D. Carlos Ruiz. - D. Chito Vázquez. - Dña. Concha Soria. - D. Daniel Pardo. - D. Dimas Aguilar. - D. Dionisio Sorando Mendoza. - D. Domingo Amante. - D. Eduardo García. - Dña. Eloísa Santiago. - Dña. Encarna Retamar. - D. Federico Martín. - D. Fernando Sánchez Corvin. - D. Francisco Alzás Alcazar. - D. Francisco Barco. - D. Francisco Gallardo. - D. Jaime Masot. - D. Javier Parra. - D. José Antonio Rodríguez Calderita. - D. José María García. - D. José María Montes Caraballo. - D. José María Rodríguez Tejada. - D. José Rodriguez. - D. José Terrón. - D. José Villafaina de la Cruz. - Dña. Joaquina Megías Remedios. - D. Joaquín González Cruz. - D. Joaquín Jiménez Valle. - D. Joaquín Lavado. - D. Joaquín Millón. - D. Juan Castaño Guerra. - D. Juan de la Cruz. - D. Juan Flores. - D. Juan José Muñoz. - D. Juan María Cervera. - D. Juan Peña. - D. Juan Zamora. - D. Julián Gallego. - D. Julio Moreno. - D. Luis Salinero. - D. Manuel Carbonell. - D. Manuel Flores. - D. Manuel Gallego Bayon. - D. Manuel Guijarro Díaz. - D. Manuel Notario Fermoselle. - D. Manuel Terrón Sanguino. - Dña. María Alonso (Mariquina). - D. Mariano Peinado Nicolás. - D. Miguel Albarrán. - D. Miguel Alcalde Buigas. - D. Pedro Paredes Ruiz. - D. Pedro Sudón Rivero. - D. Rafael Merchán. - D. Rafael Morales. - D. Rafael Pando. - D. Rafael Parra Chavero - D. Ramón Sudón Rivero. - D. Ramón Ramos. - D. Ramón Vagace. - D. Salvador Gregori. - D. Santiago Vázquez.
Imágenes cedidas por familiares
D. Blas García Molina
Imagen cedida por José Manuel Ares García
D. José María Montes Caraballo
Imagen cedida por José Rabanal Santander
Dña. Ana Martínez Lagoa
Imagen cedida por María Botello Martínez
D. Antonio Galache
Imagen cedida por María Botello Martínez
D. Mariano Peinado Nicolás
Imagen cedida por Mariano Peinado
D. Ramón Sudón Rivero
Imagen cedida por Antonio Sudón
D. Joaquín Jiménez
Imagen cedida por Santiago Chamorro Jiménez
D. Antonio Delgado Valerio Imagen cedida por Petete Delgado Parrilla
D. Carlos Ruiz Imagen cedida por Pilar AF
D. José María Rodríguez Tejada
Imagen cedida por Jesús Rodríguez
D. José Villafaina de la Cruz Imagen cedida por Amalia Villafaina Muñoz
D. Manuel Notario Fermoselle y Sra. Imagen cedida por José Manuel Martínez Vázquez
D. Manuel Terrón Sanguino Imagen cedida por Amalia Villafaina Muñoz
D. Manuel Gallego Bayon Imagen cedida por María Luisa Gallego
D. Pedro Sudón Rivero
Imagen cedida por Antonio Sudón
D. Rafael Parra Chavero
Imagen cedida por Marisol Muñoz
ooooooooooooooooooooo
Quisiera también hacer mención a aquellas personas que posiblemente sin título ninguno, durante cierto tiempo hacían esa labor en las barriadas, tales como:
En San Roque: Sra. Carlota, Sr. Hipólito, Sr. Virginio.
En las Moreras: Sra. Mercedes Grillo Barberá, Sra. Raquel.
En María Auxiliadora: Sra. Julia Fernández Román.
En Antonio Dominguez: Sra. Ani.
En la Picuriña: Sr. Joaquín García, la hermana Rosario, Sra. María.
