Carlos Ruperto Álvarez de los Reyes

Carlos Ruperto Álvarez de los Reyes, fallecido el 18 de febrero de este 2018, cocinero de profesión fue uno de los pioneros que salieron a la calle a inicios de los 80 para recuperar el Carnaval de Badajoz. Guitarra en mano, cantó con la murga Guatinay y con Jarana y después de años retirado de las coplas, reapareció en 2007 en el escenario del Teatro López de Ayala acompañando a La Mascarada de Almendralejo. 
Personaje entrañable y muy querido, Carlos Ruperto fue también durante muchos años la bombera de la Brigada Antiardores, uno de los artefactos con más solera del Carnaval.
Sus hijos Carlos y Manuel (Lolo), miembros de Marwan Chilliqui, son continuadores de la tradición carnavalera que les transmitió su padre. 
Carlos Ruperto, fue sin duda uno de los precursores de nuestra fiesta, de aquellos que a principio de los ochenta sentaron las bases de lo que hoy es el Carnaval de Badajoz del que era todo un maestro, como lo fue también en los fogones, donde demostró, al frente de distintos establecimientos hosteleros, que un plato sabe mejor si tiene un toque de buen humor, esa sonrisa que siempre iluminaba su cara. 

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Juan Valdes

Juan Rodríguez-Valdés y Paredes, nació en Badajoz el 15 de mayo de 1942, aunque su carrera artística la ha desarrollado en Sevilla. Si bien la pintura cerámica solo la ha tocado de forma esporádica, cabe reseñar la calidad pictórica de su producción. 
Tan solo es autor de dos retablos cerámicos devocionales, sitos en la ciudad de Málaga, provincia en la que posee otras obras de carácter civil consistentes principalmente en murales decorativos. 
A la temprana edad de ocho años quedó huérfano de padre y madre, circunstancia que marcó su vida y su obra. Su afición por el dibujo comienza con la copia de fotografías de toros y recortes de prensa taurina plasmados sobre materiales de desecho.
Matriculado como alumno en la escuela de artes y oficios de Badajoz, comienza a participar a los catorce años en certámenes para artistas noveles organizados por ayuntamientos y diputaciones.
A los 17 años llega a Sevilla con una beca de la Diputación de Badajoz para estudiar en la Escuela de Bellas Artes para mejorar su nivel de formación y entrar en contacto con un ambiente artístico más amplio, hecho que le supone un gran esfuerzo puesto que para el ingreso en la escuela superior de Bellas Artes de Sta. Isabel de Hungría, en Sevilla, era necesario haber acabado los estudios de bachillerato y poseer un nivel cultural general amplio. 
Los primeros años de su estancia en Sevilla fueron duros, pues no contaba con los recursos económicos necesarios. Gracias a la generosidad de la familia de uno de sus condiscípulos, Antonio Zambrana, y a sus trabajos en las horas libres de escuela, Juan consiguió cursar sus cinco años de carrera pudiendo crear de este modo y gracias a los fundamentos obtenidos por grandes pintores y maestros, las bases sobre las que ha sido posible ir creando su obra. 
A Juan Valdés se le conoce por su pintura figurativa y no quiere encasillarse, ha plasmado flamenco, toreo e imágenes de carnaval, y sobre todo, se le conoce por sus retratos. Él ha sido el único pintor para el que posaron los Reyes Don Juan Carlos y Doña Sofía, cuyo retrato sería  para presidir el pabellón real de la Expo'92. 
Ha firmado trescientos retratos, ha pintado más de setecientas obras y hay cuadros suyos colgados en cinco museos internacionales. Ha retratado además de Don Juan Carlos y Doña Sofía, al actual Rey de España, Felipe VI, a Cayetana de Borbón, al Papa Benedicto XVI, a Juanita Reina, a Rocío Jurado, a Curro Romero, a Antonio Ordóñez, a Paco de Lucía, a Manolo Sanlúcar, a Antonio Mairena, etc …
El gran momento de su vida fue el título de Hijo Predilecto de Badajoz, al recibir el reconocimiento en la tierra de su familia, donde están todos enterrados. 


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Varias de sus obras

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Video subido por Enrique Angulo
Donde podemos ver varias de sus obras

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Manuel Fernández Mejías

Manuel Fernández Mejías (1911-1989). Pintor conocidísimo en la ciudad, seguidor de las enseñanzas de Adelardo Covarsí y Antonio Juez, sus primeros maestros, y coetáneo de otros tan ilustres como Eugenio Hermoso, Ramón Fernández Moreno, Alejandro Tinoco, José Amador Purificación, Guillermo Silveira y Félix Fernández Torrado, entre otros más. Hecho a sí mismo, su carrera pictórica y profesoral la alternó con numerosos viajes, dada su condición de hijo de ferroviario. 
Adelantado a su tiempo, Manuel Fernández Mejías, de complexión atlética, supo alternar la pintura con la práctica de diversos deportes, como el boxeo, el ciclismo, la natación, la vela, la caza, la pesca y el motociclismo. Quién no recuerda a MFM, paseándose por las calles de la ciudad, a bordo de sus impresionantes motos de muchas cilindradas, así como entrando y saliendo de su estudio, en la calle Montesinos, con esa elegancia suya tan característica, todo un caballero, amigo de sus amigos, hombre cabal y bondadoso donde los hubiera. 
Pero hay un detalle en su vida que le marcó para los restos: su matrimonio en 1944 con la simpar Eva Callejo García, mujer polifacética, una de las féminas con mayor personalidad que haya dado esta ciudad, con una actividad desbordante como escritora, pintora, deportista, concejala, etc....
Con la cual tuvo tres hijos, uno de ellos Juan Manuel Fernandez Callejo pintor y continuador de su saga artística, Gonzalo, y el menor Rafael (fallecido en 2022)  también muy reconocido por haber formado parte del famoso grupo musical pacense "Tam Tam Go!". 
En todo momento sigue las directrices de los pintores clásicos del XVII en cuanto a bodegones, y así encontramos una extensa producción de cacerolas, frutas, cazos, peces y cestos de mimbre, paralelos a los bodegones de cacería. Aún así, también fue un pintor que cultivó los temas de Marinas, Retratos y los paisajes extremeños, que rezuman vida y melancolía a un tiempo. 
Tiene una calle con su nombre en el corazón de la ciudad junto a Puerta Pilar. 

Texto de Pedro Montero. El Avisador de Badajoz. 
Fotografias proporcionadas por su hijo Juan Manuel Fernandez Callejo. 

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Algunas de sus obras


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Josefina Real Fariña "Fini"

Empezar en 1875 y llegar hasta hoy no es fácil, en medio de ello distan cuatro generaciones de comerciantes, pero si hay alguien que representa realmente a esa estirpe, esa es Josefina, más conocida como 'Fini".
Ella se jubiló hace ya algunos años, pero todavía se la puede ver por esa tienda histórica de nuestra ciudad que es Casa Espada, cuyo nombre es el mote que le pusieron al abuelo de ella, un feriante andaluz que se estableció en Badajoz a finales del siglo XIX. Aunque su abuelo "Espada" fue el fundador, para ella el verdadero impulsor de la estirpe comercial fue su padre, pionero en sacar provecho a los artículos de temporada. 
Según Josefina, lo importante es saber lo que se necesita en cada momento. 
Por ello Casa Espada vendía caretas a los portugueses cuando en nuestro país los Carnavales estaban prohibidos o bien traer en verano alpargatas de esparto para los segadores. 
Con los años ha aprendido que no todo el mundo tiene talento para el comercio, pero a ella le viene de herencia.
Es una mujer muy trabajadora, muy buena vendedora, campechana, amable, un verdadero ejemplo a seguir por la nueva generación de comerciantes y empresarios no sólo de Badajoz, sino de toda Extremadura. 
Siguiendo con la tradición y el buen hacer adquirido a lo largo de los años, procura satisfacer todas las necesidades que sus clientes le demandan, ofreciendo una atención cercana y profesional, así como asesoramiento individual y especializado. 
Actualmente la tienda está situada en la calle Francisco Pizarro, regentada por su hijo Sergio Pereira. 

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